He vuelto a la Metformina. Me reencuentro con sensaciones que han ido yendo y viniendo desde hace ya casi dos años. Estoy muy mareada. Otra vez han vuelto las náuseas, el sabor metálico en la boca, un bajón en el ánimo que me manda a los suelos; luego arriba, otra vez abajo.
Finalmente asocio los hechos. Primero Glucophage y luego Clomifeno. Me ha tomado tiempo entender que no es obra de magia. La tristeza constante es uno más de los efectos secundarios. Por momentos hasta he pensado que si se va definitivamente la echaré mucho de menos.
Esta mañana, no sé si por la pura vagancia, porque soy mimada o por mi ovalado medicamento, no he podido levantarme a tiempo de la cama. "Misha, I am so dizzy", le dije. "Is it OK if you have your breakfast alone?" Luego solo recuerdo un beso y la puerta sonando, un poco más tarde.
Soy muy afortunada por tener a Misha cerca. Tiene una dulzura que nunca antes había encontrado. Tengo también mis desfortunas, pero no puedo hacer más que caminar en contra de ellas.
2 comentarios:
Hola, soy tu vecina...ya me lei tu blog entero. Estas en la otra costa, yo estoy al Oeste en Cumbria. Osea que basicamente a vos te ha caido toda la nieve a mi toda el agua y los vientos huracanados. Ojala que te pongas mejor!! ya mismo viene la primavera. G. Andrade
Hola G. Andrade,
Nunca he estado en Cumbria. Lo único que me suena es Carslile, de donde llegaba tarde mi profesor de guión todos martes del trimestre pasado.
Pero bueno, se acabó el curso...
Estuvo muy bonita la nieve. Ahora ya parece primavera en Durham. Ojalá algún rato te pueda conocer. Gracias por tus buenos deseos!
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